Los trastornos del sueño son un común denominador en niños que nacen con problemas de neurodesarrollo
El insomnio es uno de los problemas con mayor incidencia en niños con TEA, así como en personas con déficit de atención e hiperactividad.
Ellos duermen menos, sufren dificultad para conciliar el sueño, despiertan varias veces durante la noche y experimentan somnolencia diurna.
Los trastornos del neurodesarrollo comprenden un grupo heterogéneo de cuadros clínicos que causan síntomas desde las primeras etapas de la vida y que afectan a la evolución del desarrollo cognitivo, del lenguaje y de la conducta. Se trata, en su mayor parte, de trastornos crónicos con un conjunto amplio de etiologías y afecciones
Vale decir que ya se han identificado más de 80 tipos de trastornos relacionados con el sueño y la prevalencia de muchos de ellos es superior en personas con esta condición.
Diagnóstico en niños con TEA
Los expertos consideran que el infradiagnóstico de los problemas de sueño en niños con TEA antes de los 6 años de edad puede causar daños irreversibles en su sistema neurológico. Por ello la observación de los padres seguida de la notificación de algún comportamiento anormal en los patrones de sueño de su hijo/a con TEA es crucial para el abordaje inmediato.
El déficit en la cantidad de horas y calidad del sueño en estas personas afecta su conducta social al igual que su proceso de aprendizaje, sin embargo, el tratamiento óptimo al respecto mejora aspectos como su interés comunicativo, las acciones impulsivas o agresivas y su progreso en cada actividad.
El diagnóstico y abordaje del Trastornos del Espectro Autismo requiere de la intervención de diferentes médicos especialistas y terapeutas dedicados a procurar la mejor calidad de vida de estas personas quienes necesitan dormir mejor para beneficio de su desarrollo.