La desnudez nocturna obliga al cuerpo a ajustar su temperatura para un sueño reparador
Luego de una larga jornada de actividades la hora de dormir merece ser un ritual para relajarnos y procurar la mayor comodidad posible. Usar pijama u otra prenda de vestir no necesariamente encaja dentro de este escenario según los expertos.
La evidencia científica demuestra que quienes duermen como Dios los trajo al mundo alcanzan el tan anhelado sueño REM, ese sueño profundo que nos permite estar alertas, entusiastas al despertar, con menos estrés y sin tanto apetito como cuando has tenido insomnio.
La solución no necesariamente es colocarte medias o usar una ropita ligera. Durante la noche, el cuerpo necesita bajar la temperatura para enviar la señal al cerebro que hora de empezar a reponer energías, por ello el organismo experimenta procesos regulatorios y regeneradores mientras dormimos, por lo que al estar desnudos, éstos se optimizan de forma natural, según los científicos.
Uno de los factores que influyen en alteraciones del buen dormir como el insomnio, es la temperatura externa a la que nos exponemos, sea aire acondicionado o la calefacción así como la misma temperatura central.
Cuando vamos a la cama el cerebro envía mensajes a los vasos sanguíneos para que liberen calor, por lo que es importante no cubrirnos demasiado a favor que nuestro cuerpo esté menos caliente de lo normal para que el cerebro pueda regular la temperatura sin problemas.
Los estudios aseguran que quienes duermen desnudos saben cómo regular mejor su propia temperatura para la adecuada liberación de melatonina durante la noche y no padecer de mucho frío o calor.
Las personas que no usan prendas de vestir al dormir presentan niveles estables de glucosa en sangre porque la regulación de la temperatura se controla la insulina.
Algunos estudios indican que también contribuye a quemar calorías porque el organismo se obliga a generar calor.
La sensación de placer y comodidad estimula la liberación de oxitocina, la cual reduce la presión arterial, estimula el sistema inmunológico, minimiza la ansiedad y protege el corazón.
Por esta razón los especialistas agregan que esta buena práctica mejora la vida en pareja y la sexualidad, al tiempo que en las mujeres evita infecciones vaginales por el uso de ropa interior y en los hombres se dice que preserva la calidad de su esperma.
