
El insomnio nos hace más propensos a desarrollar diabetes
Al sufrir de insomnio, aumentan los niveles de cortisol en nuestro organismo, alterando así los valores de insulina que controlan la glucosa en la sangre.
Dormir poco reduce la curva de tolerancia a la glucosa, mientras que tener diabetes deriva en una serie de condiciones que no permiten conciliar un sueño reparador. Los pacientes con diabetes tipo 2 tienden a ser personas que sufren trastornos del sueño.
La diabetes es una enfermedad crónica que afecta actualmente al menos a 442 millones de personas según la Organización Mundial de la Salud.
Diabetes y sueño
Un paciente que no duerme adecuadamente y no ha sido diagnosticado con diabetes experimenta una elevación en sus niveles de cortisol así como de sustancias que aumentan la resistencia a la insulina. Puede que comience a desarrollar la enfermedad y no sienta ningún síntoma aun.
La Dra. Celia García Malo explica que la obesidad implica un factor de riesgo para el desarrollo de diabetes así como también de apneas del sueño, otro problema de salud relacionado con el mal dormir.
Mayor riesgo para adultos
Dentro de la clasificación de la diabetes se distinguen tres tipos principales: la tipo 1, tipo 2 y la gestacional.
La diabetes tipo 1 afecta principalmente a los niños mientras que la tipo 2 la desarrollan los adultos.
Al respecto, la doctora Celia García Malo detalla que la base de la diabetes tipo 2 es que el propio organismo no es capaz de “limpiar” el exceso de glucosa en la sangre.
Este último subtipo es la que supone una predisposición más marcada a los trastornos del sueño, porque está directamente relacionada con obesidad, hipertensión, hipercolesterolemia y aumento del riesgo cardiovascular.
Enfermedad Silente
El más importante organismo de la salud mundial advierte que la diabetes hoy representa la séptima causa de muerte y que en el año 2030 se multiplicará el número de pacientes si no se toma responsabilidad individual sobre la alimentación y mejores hábitos de vida.
Muchas personas pueden estar empezando a transitar el camino hacia el padecimiento de la diabetes y detectarlo cuando ya está establecida la enfermedad ya que no se manifiestan síntomas, por lo que es muy importante realizar chequeos periódicos de niveles de glucosa como control preventivo.