Apnea Obstructiva del Sueño y bruxismo
Cuando dormimos se relajan los músculos de la garganta provocando el estrechamiento de la vía aérea superior, llegando a cerrarse completamente en algunos casos.
Este mecanismo de la apnea detiene el correcto paso de aire a los pulmones así como el oxígeno necesario al cerebro y ocasiona que el cerebro no reciba suficiente oxígeno.
Tras un episodio el paciente experimenta un súbito despertar para recuperar la respiración, ronca y presiona sus dientes. Todo ello limita la posibilidad de tener sueño profundo y reparador ya que el cerebro se mantiene alerta por supervivencia.
El bruxismo, que también puede ser por stress, causa desgaste en las piezas dentales, dolor en la mandíbula, cefaleas entre otros síntomas. De allí que los odontólogos consideren como primera opción de diagnóstico la apnea del sueño en pacientes con bruxismo, así como también su historia clínica y rutinas diarias.
Solución odontológica
La solución a este problema es la colocación de una férula de descarga o un dispositivo de avance mandibular que evita que se desgasten los dientes, permite la relajación de la musculatura y produce un adelantamiento de la mandíbula que abre el espacio a nivel de la orofaringe (garganta).
Los odontólogos recomiendan descartar las apneas en pacientes con bruxismo y entienden que con el adecuado abordaje controlan los ronquidos con o sin apneas asociadas.
Son solo los dentistas los encargados de fabricar, colocar, ajustar, controlar y tratar las complicaciones asociadas con el tratamiento con aparatos orales que se utilizan para tratar los trastornos respiratorios relacionados con el sueño.
El uso de estos dispositivos contribuye a mejorar la calidad del sueño el cual se vuelve reparador porque su diseño mantiene la mandíbula hacia adelante mientras se duerme para respirar mejor.
